martes, 11 de mayo de 2010

ROTONDAS

Calesitas del infierno. Todos girando, desde la derecha o la izquierda a fuerza de meter la trompa del auto hasta el cuadril de la curva! Caballos con ruedas que no suben ni bajan pero que arremeten y frenan . Todos enojados, rugen bocinazos, gestos obscenos, ceños fruncidos, palabras impúdicas. Los conductores mutan en poseídos que vociferan por lo que dura el trance de la vuelta.
Y el manual del curso de manejo que decía? Qué importa.
Ahora lo que vale es el yo primero. Yo soy más vivo o más fuerte. Vale el no te miro, el yo primero, el yo primero, me atravieso. Vale el soy más grande, más nuevo. Y me vuelvo trampa, corto la circulación, no te miro, no te escucho, te ignoro, falta poco, vamos, vamos, quiero salir, yo primero...entonces no te miro, no quiero, no puedo... por que si te mirase por un instante a los ojos, si te diera un lugar y fueras una cara en mi alma...correría el riesgo de volver a ser humano...y eso...prolongaría la estadía en este círculo maldito.